DESPIERTESE MADRECITA. El regreso de un ilegal.

DESPIERTESE MADRECITA

 

Despiértese madrecita,

¡Ya vine del otro lado!

Traigo ganas de abrazarla

Tanto tiempo que aquí no he estado

Y mire que usted dormida

Como si no hubiera llegado.

 

Si ya es de madrugada

Se oyen cantar los gallos

Yo pienso que va a llovernos

En la sierra se miran rayos

Y mire que usted dormida

Como si estuviera en un desmayo

 

También era de madrugada ¿Se acuerda?

Cuando me echara su bendición

Pos me iba yo para el norte

Y usted en la puerta del camión

Nomás a llore que llore

Con lágrimas del corazón

 

Recuerdo que  también me puse triste

Cuando me agache y me bendijo

Porque la iba a dejar solita

Y como  soy su único hijo

¡Pero que quería que hiciera madre!

¡Ya ve que aquí esta canijo!

 

Ahí nomás de peón de albañil

Siempre trabajando en la obra

¿Cuándo íbamos a salir de pobres?

Y usted lo sabe de sobra

Que uno es el que hace el trabajo

Pero es otro el que lo cobra

 

Aunque… allá en el otro lado

Las cosas también son iguales

Pero ¡Allá pagan en dolaritos!

Y así son menos los males

Porque si trabajas y juntas

Prontito que de pobre sales.

 

¡Pero despiértese madrecita!

Para contarle de mis quehaceres

De cómo era bueno para el trabajo

Y siempre cumplí con mis deberes

Aunque allá hay que entrarle a lo que salga

Nada de que a esto tú no quieres

 

Trabajaba catorce horas

Cuando anduve de jardinero

Aprendí a lavar los platos

Y también de cocinero

Hacia hasta lo que me daba asco

Con tal de ganar dinero.

 

Porque  usted madre ya sabe

Como soy rete asqueroso

Pues allá levantaba hasta cacas de perro

Un día limpie un drenaje apestoso

Ah como sufría cuando arreglábamos techos

Ya ve que pa las alturas soy rete miedoso.

 

Lo más triste es que hay patrones

Que a uno lo tratan rete mal

Te hacen que trabajes

Pero de veras un titipuchal

Y al hora de la paga

Puras hojas sin tamal.

 

¡Pero hay otros!

Bien buenas gentes de al tiro

Que me pagaban hasta de a cien

Uh… con esos trabajaba yo bien chiro

Y lueguito juntaba mis centavos

Pa mandarle a usted su buen giro

 

Y en mis cartas le decía

Que si lo gastaba no me molesta

Que se comprara su buena cama

Pa que durmiera  la siesta

Su abanico pa los calores

Sus enaguas para la fiesta…

 

Que no se  preocupara por mí

Pos le voy a decir la neta

Que yo de garras tenía….

Bien repleta una maleta

Y aunque no me lo crea madre

Ya tenía una bicicleta.

 

Mirela….se está sonriendo

Ya se me puso contenta

Entonces deje contarle

De una vez que fui a una feria

Y me trepe a las sillas

Esas como las que vienen a las fiestas

 

Mire mama, yo trepado a vuelta y vuelta

Nomás amarrado de un mecate

A grito y grito allá arriba

Con el corazón a late y late

Haga de cuenta igual de asustado

Como el día de hoy… que me treparon a un aguacate.

 

Yo andaba trabajando

Con uno de aquí del rancho

Usted lo conoce madre

Viven ahí junto con don Pancho

Los de la casa bien grande

Esa que tiene el portón ancho

 

Yo no me quería subir madre

Pero como de miedoso ya tengo fama

Pos aquel me trepo a la fuerza

Porque de mandón en tipo se ufana

Pos ya cuando estaba arriba

Oí como que trono aquella rama…

 

Pero… ¡Despiértese madrecita!

¡Pa que vea que no estoy malo!

¡Y no les vaya a creer!

¡Si le dicen que me caí de un palo!

Y si le hablan por el aparato

Madrecita…no vaya a ir a contestarlo.

 

Ni tampoco les vaya a creer

Que cuando caí me puse muy mal

Que llamaron a una ambulancia

Pa que me llevara al hospital

Y que ahorita en la madrugada

Ya deje de respirar.

 

¡Despiértese madrecita!

¡Pa que me diga que no es cierto!

¡Quiero que me abrace! ¡Quiero que me bese!

¡Póngase contenta porque por fin ya he vuelto!

¡Despiértese madrecita! ¡Dígame que me mira!

¡Digame madrecita que yo… que yo no estoy muerto!

 

Pero… ¿Está llorando madrecita?

¡Entonces no se despierte!

Pues no sé porque presiento

Que este mal hijo que tiene

Mañana le va a causar, rete harto sufrimiento.

 

Duérmase mi viejita hermosa

 Duérmase y no llore…

 

Ya vine del Norte

Como se lo prometí el día que me bendijo

Y ya no me voy a ir

Pues le prometo por ese  crucifijo

Que aunque usted no me mire, aunque usted no me bese

Para siempre… aquí se va a quedar su hijo.

 

Francisco Rodríguez.